LECCIÓN DE BUENAS MANERAS Y SABER ESTAR
Ayer, 19/06/2014, se convertía en un día para el recuerdo, un día que hacía historia, y que muchos de nosotros le contaremos a nuestros hijos y nietos. La proclamación de Felipe VI como rey de España, hacía olvidar, aunque fuera un poquito, el mal trago por el que lo esta pasando la Roja en Brasil.
Pero el blog de esta semana no trata ni sobre política, ni fútbol, ni siquiera protocolo institucional, tampoco voy a hablar acerca del cambio de atuendo de, la ya, Reina Letizia, para ponerse de corto en la ceremonia ( en mi opinión un giro acertado, no tengo criticas). No, hoy voy a hablaros de dos pequeñas, que bajo mi punto de vista, merecen una mención especial.
La Princesa de Asturias, Doña Leonor y su hermana, la infanta Sofia, son dos niñas de 7 y 8 años, mas que preparadas para lo que se les viene encima. Pero no por ello es menos admirable. Su comportamiento durante estos días demuestra que están bien educadas, pero no bien por ser infantas, no!, bien para ser niñas sin mas.
Cuantas veces hemos estado en una sala de espera de una consulta, supermercado, cafetería y nos hemos topado con esos niños que se lo llevan todo por delante. Pues bien, los niños por muy niños que sean, no se les debe dejar cual potrillos por el campo. Unas bases a la hora de salir de casa, un decirles hoy os tenéis que comportar es básico, y no hace falta que sean de la casa real. Son nuestros hijos y se merecen tener una buena educación y conocimiento básico sobre lo que entendemos como buenas maneras.
Los niños deben decir gracias, por favor y denada, saludar y respetar el turno de palabra, sobre todo cuando es un adulto el que esta hablando. Los niños tienen que saber comportarse cuando salen a la calle y conviven con otras personas, adultos u otros niños. Deben respetar, y conocer las normas básicas de educación y buen comportamiento en la mesa. Y no tienen que ser dos pequeñas en la proclamación de Rey de su padre, deben ser todos los niños, ya que todos conviven en sociedad. Con esto no estoy diciendo que se encorsete a los niños, ni que se les de con un vara de avellano, lo que digo es que se eduque, que se de la importancia, que se merecen las buenas maneras, y el saber estar. Los niños nunca deben de dejar de ser niños, ni deben perder su naturalidad.
El claro ejemplo lo vimos ayer, se portaron como niñas, perdidas entre tanta solemnidad, aburridas por un largo discurso, y sentaditas con los pies colgando de esas enormes sillas, pero en ningún momento llamaron la atención, ni gritaron…y siempre atentas a lo que cada uno de sus padres les dijera.
Ayer Doña SofíayDoña Leonor dieron un ejemplo de actitud, que muchos adultos que las rodeaban no lo dieron.
Cabe decir que cuando me refiero a los niños, que también, hablo de todos nosotros…si empezamos de pequeñitos, pronto se convertirá en costumbre. Y hay por ahí mucho adulto, que ha sido un niño mal educado.
Desde aqui
quiero lanzar un grito desesperado para que las buenas maneras se recuperen, y vuelvan a inculcarse dentro de las familias. Un sociedad en la que la gente sonríe, se dice hola, gracias y por favor, no puede ser mala.
Trackbacks & Pingbacks